Envidio a esa gente que día a día no nota como las cosas van cambiando, como las cosas van desapareciendo pero que, cuando echan la vista atrás se dan cuenta de que ya nada es diferente.
Tengo la maldita costumbre de darme cuenta día a día de que las cosas van cambiando, a veces mejorando y otras, por desgracia, empeorando. Pero lo peor de todo es que me doy cuenta de que estoy (estamos) haciendo las cosas mal y que no hacemos nada para impedirlo.
Y al echar la vista atrás parece que nada ha cambiado pues vivo con ello día a día.
Sin embargo a veces preferiría ser normal y sólo darme cuenta de que las cosas cambian pasado un tiempo pues ahora tengo la necesidad de hacer algo para cambiarlo todo y así sentirme bien conmigo misma, sentirme bien con el resto del mundo.
Pero mi cama hoy está más cómoda de lo normal y parece que va a llover así que esta vez pienso quedarme aquí, esperando a que alguien venga a por mi y me diga que todo va a salir bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario